Pues bien, la mayoría de los profesionales sanitarios han elegido trabajar en la sanidad movidos por su deseo de marcar la diferencia en la vida de los pacientes. Y nosotros también. Hemos elegido seguir esta vocación abordando el mayor problema de la asistencia sanitaria: la falta de pruebas en el mundo real sobre los resultados de la atención.
Para nosotros, que la sociedad niegue a los pacientes una atención mejor por falta de acceso a los datos no es ético, en un mundo en el que la tecnología mejoró tantos aspectos de nuestro mundo. Poner las pruebas adecuadas a disposición de las organizaciones sanitarias para ayudar a evitar una vida perdida, una complicación de la atención, un tratamiento fallido es la obligación moral que tienen las grandes empresas tecnológicas: es nuestro Juramento Hipocrático.
En Promptly, todo lo que hacemos está impulsado por nuestro propósito principal: promover cada día una mejor asistencia sanitaria a un menor coste para los pacientes, poniendo a su disposición los resultados sanitarios.